Ángel Pisano

A pesar de parecer ser objetos inertes, sin valor alguno, no hay nada más representativo y que supongan mayor orgullo para una sociedad que los escudos y las banderas. Su alto significado les confiere de una especial relevancia como símbolos de unión y pertenencia, sirviendo como elementos de convivencia y fraternidad entre todos. Precisamente, con el objetivo de reforzar ese sentimiento, el pueblo palentino de Villamuriel de Cerrato inició un proceso democrático allá por 2021 para elegir la que sería su bandera.

Ahora, en 2023, ha sido finalmente aprobada por la Junta de Castilla y León, tras su publicación en el Boletín Oficial de la Comunidad (BOCyL), y una vez recibido el informe favorable del cronista de armas de la región, tal y como se refleja en la publicación de este jueves 24 de agosto.

De esta manera, Villamuriel de Cerrato ya puede lucir con orgullo su nueva bandera, elegida por los vecinos entre una serie de opciones que tuvieron la opción de escoger mediante una consulta pública.

El concurso de idea se inició en 2021 y acabó por formalizarse en 2022, cuando resultó escogida por los vecinos el diseño de Esther Antolín Nieto, que se presentó al proceso bajo el pseudónimo de ‘Cerrateña’,

Durante el proceso de consulta logró el respaldo del 41% de los votos. Está formada por una cruz blanca que divide el paño de la bandera en cuatro partes, formados por los colores verde, que representa a los pastos y arboledas que recorren el Canal de Castilla y el Río Carrión, y el amarillo, en alusión a los campos de trigo y los cerros de tierra. 

La cruz blanca, cuyo color evoca el valor de la industria, tradición e historia, confluye en un punto común en el centro, de forma circular, que representa un punto de encuentro entre todos los caminos y es allí, precisamente, donde preside el escudo del municipio.

La publicación en el Bocyl de este jueves significa de esta manera la aprobación definitiva de este nuevo símbolo como oficial para su general conocimiento.

El Español